7º Andalucía, un pilar de las energías renovables
Recortes Cero defiende una política ecológica que convierta Andalucía en punta de lanza de las energías limpias y renovables, un motor de la economía y el empleo y vanguardia de la independencia energética del país.
La nueva crisis económica y la guerra han puesto de manifiesto la urgente necesidad de acabar con la dependencia de las energías fósiles y convertir a nuestro país en independiente energéticamente del exterior.
Andalucía cuenta con inmensos recursos naturales para el desarrollo de nuevas energías limpias y renovables, beneficiosas para el medio ambiente y una de las mayores fuentes de riqueza y empleo cualificado y estable, motor del desarrollo económico, especialmente en sectores de alta tecnología ecológica.
Y que al mismo tiempo garantice la lucha contra el cambio climático y la protección de la riqueza y diversidad medioambiental.
Un nuevo modelo energético
Andalucía tiene todas las condiciones para encabezar el cambio de modelo energético con energías verdes, renovables y baratas, acabar con la
dependencia energética de las energías fósiles y alcanzar la autonomía energética del exterior. Potentes cuencas hidrográficas, zonas con un flujo constante de viento como el Campo de Gibraltar, las corrientes marinas y sobre todo, el sol. Las provincias andaluzas son las más soleadas de España con más de 3.000 horas de sol al año. Además cuenta con gran capacidad de generar energía con biomasa y biogás.
El sector de las renovables en Andalucía es uno de los que más crece, un 245% en los últimos quince años. El consumo de energía procedente de fuentes renovables en Andalucía supera el 23% y aporta entorno al 15% de la energía de origen verde del total nacional, evita la emisión de miles de toneladas de CO2 a la atmósfera y emplea unos 60.000 trabajadores, según el portal “energías-renovables.com”.
La Plataforma Solar de Tabernas (Almería) alberga el centro de investigaciones de tecnologías solares más importante de la UE.
Estos hechos demuestran las inmensas posibilidades para convertirse en la punta de lanza de un nuevo modelo energético para Andalucía y para toda España.
- Evitar con todos los medios al alcance de la Junta el control monopolista de los fondos europeos y que el dinero de las ayudas lo acapare un pequeño grupo de monopolistas nacionales y sobre todo extranjeros. Garantizar el acceso de las pymes a los fondos europeos. Según el documento “Estrategia Energética de Andalucía 2030”, el 97% de las empresas de energía renovable son pymes.
- Convertir todas las ayudas públicas en acciones y capacidad de decisión en las empresas que las reciban.
- Desarrollar un tejido industrial con las energías renovables promoviendo empresas públicas y público-privadas con participación de la Junta y de los ayuntamientos y de los autónomos y pymes.
- Ley Autonómica de Medio Ambiente:
- Que garantice la biodiversidad, la protección de la fauna y flora y la educación ambiental. Y acabe con la impunidad de los grandes monopolios para contaminar.
- Que fomente la agricultura biológica y la ganadería ecológica y extensiva, apoyando las cooperativas, redes de distribución alternativas, el comercio con denominación de origen.
- Apoye y ayude a las prácticas agrícolas y ganaderas que eviten la desertización.
- Y prohíba la privatización de recursos naturales estratégicos. Una nueva cultura del agua, un bien común no privatizable, basada en el ahorro y la eficiencia.Desde Andalucía trabajaremos por que se establezca un calendario a nivel nacional para el desmantelamiento de todas las centrales nucleares...
- Multiplicar la inversión en I+D+i en energías renovables, y crear un eje industrial andaluz en torno a este sector estratégico, creando una formidable fuente de riqueza y empleo de calidad.
- Fomento de la economía verde en todos los campos: agricultura, energía, nuevas tecnologías, educación ambiental...
- Impulsar la agricultura y ganadería ecológica, apoyando las cooperativas agrarias y los medios de distribución alternativos.
- Una nueva cultura del agua, basada en el ahorro y la eficiencia.
- Una “Política de Residuos Mínimos”. Recuperación de los residuos reutilizables y reciclables.
- Prohibición de la obsolescencia programada para que no se programe el final de la vida útil de los productos de forma premeditada para incrementar las ventas de forma artificial.
- Reequilibrio territorial de personas, servicios e infraestructuras adaptadas al territorio.
- Cambio global en la política de movilidad, basada en el fomento de la proximidad y la accesibilidad entre trabajo, vivienda y ocio correlativa al reequilibrio territorial.
- Mayor compromiso en la lucha contra el cambio climático, en la línea de las propuestas de los científicos de Naciones Unidas y otros organismo internacionales.
- Mayor compromiso en la lucha contra la impunidad de los grandes monopolios. Una fiscalidad ecológica que premie los consumos responsables y sancione los consumos irresponsables de las grandes empresas.
- Garantizar el control de transgénicos y productos utilizados en la transformación de alimentos.
- Contra el maltrato animal:
- Desarrollo de la Ley Sacrificio Cero.
- Normas claras contra el maltrato animal y, especialmente, en cuanto a los animales destinados a consumo humano (tanto en fase de crecimiento como en sacrificio).
- Revisión de la regulación del control poblacional de los animales y de su explotación comercial.