Intervención de Violeta Tercedor, estudiante y promotora de Recortes Cero, en la mesa redonda contra la Ley Wert en la Universidad de Granada
En la línea de promover y apoyar todas las luchas contra los recortes, la agrupación electoral RECORTES CERO hemos participado activamente en la huelga de estudiantes convocada el 26 y 27 de marzo contra el ataque a la educación pública que supone la Ley Wert.
Violeta Tercedor López, estudiante de Biología en la Universidad de Granada (UGR), promotora de RECORTES CERO, miembro de la Asamblea UGR y activista de la Marea Verde, intervino en la mesa redonda “La reforma universitaria a debate. El “informe Wert” y sus consecuencias”.
Lo hizo junto al decano de la facultad, Antonio Ríos, el representante de la Asociación de Jóvenes Investigadores Precarios, José Antonio Ruíz. También participaron representantes del PAS (personal de administración y servicios) y del PDI (personal docente e investigador). Una amplia representación de todos los sectores universitarios, en un ciclo de mesas redondas que busca “responder a través de la participación y la (re)construcción de una Universidad pública que sea de tod@as y para tod@s”, donde Violeta Tercedor fue la voz de los estudiantes.
La promotora de RECORTES CERO denunció que “el aumento de las tasas supone, como media en toda España, un incremento en el precio de la matrícula de 540 euros por estudiante”. Remarcando que “la media en Andalucía es de un aumento del 77% en la primera matrícula, en la segunda de un 77,9%, o en la tercera de un 184,37%”. Esto se traduce en que “hay unos 30.000 estudiantes en toda España que han sido expulsados por motivos económicos, en Andalucía unos 6.500”.
Evidenciando que “tras su máscara de reivindicar “la cultura del esfuerzo” [una de las mentiras con las que Wert camufla sus recortes] lo que hacen es disminuir las becas”. O imponer para los masters –imprescindibles para encontrar una salida laboral- unos precios prohibitivos para la mayoría.
Violeta Tercedor quiso señalar que los recortes en educación “se están cebando especialmente con las clases más populares”.
Denunciando que “estamos volviendo a gritar en las manifestaciones el hijo del obrero a la universidad. La cruda realidad es que muchas familias no pueden permitirse el lujo de que sus hijos se planteen estudiar en la universidad”.
Pero, sobre todo, desde RECORTES CERO planteamos una alternativa para conquistar una educación nacional, democrática, científica y al servicio del pueblo.
Como señalo Violeta Tercedor “es mentira que no haya dinero en España para invertir en educación. El PIB de España está muy cercano a la media europea, sin embargo lo que se invierte en educación está muy por debajo. En la UE-25, España ocupa el puesto 21”. Afirmando que “la educación es un motor de crecimiento y desarrollo para un país. De hecho, todos los países que crecen en el mundo están invirtiendo en educación. Para España, recortar en educación no solo supone menos pan para hoy, sino sobre todo mucha más hambre para mañana”.
Lanzando la pregunta clave: “no nos queda otra que preguntarnos por qué se hacen estos recortes, de dónde vienen y a qué plan corresponden”.
La respuesta está en un solo dato: “en abril de 2012, una semana después de que se hubieran presentado los presupuestos, que ya incluían un recorte del 21,9% en educación, por las presiones constantes de la Troika, Rajoy los reforma para incluir un nuevo recorte de 10.000 millones de euros, 3.000 de ellos en educación”.
Señalando que “si Wert está desmantelando la educación pública como lo está haciendo es por ser el alumno más obediente de organismos internacionales como el FMI”.
Para concluir su intervención, Violeta Tercedor remarcó que “sin unidad no vamos a ningún lado. Yo estoy aquí como estudiante, los estudiantes tenemos nuestras reivindicaciones concretas, igual que las tienen el resto de sectores. Pero tenemos que unirnos todos. Aprendiendo de la lucha contra la privatización de la sanidad en Madrid. Si han ganado es porque se han unido médicos, enfermeros, pacientes… Sólo llamar a esa unidad porque lo que está claro es que sí se puede”.